Como anillo al dedo.
No se si llamarlo suerte , coincidencia o planificación adecuada, pero es que las cosas ocurren como ocurren. En ningún momento de la vida de esto a lo que muchos llaman gobierno , pero que a mi me parece mas similar a un disparate de país de locos, convino tanto que apareciera Mario Zelaya como el día en que apareció. Casi creería , siendo mal pensado que su aparición fue planificada. Siempre he sostenido que el Juan Orlandismo, manejo desde la campaña el decálogo publicitario nazi, a la perfección. Al respecto , el ideario de Goebbels dice “ Principio de la transposición. Cargar sobre el adversario los propios errores o defectos, respondiendo el ataque con el ataque. Si no puedes negar las malas noticias, inventa otras que las distraigan . “, y lamento decir que no se porque pero los hechos de esta semana relacionados con Mario Zelaya me dan la sensación de no ser una mera coincidencia , sino mas bien un algo orquestado y planificado. La semana pasada en el con