En honor a la verdad debo admitir que desconozco si fue en Honduras donde se acuñó el término “partido de maletín”, pero admito que es un término que describe a la perfección un fenómeno político que ha hecho mucho daño a nuestro país y sigue haciéndolo. Esta frase se refiere a partidos políticos creados con el único propósito de meter mano a los dineros públicos mediante una estructura de mucho provecho tanto para los partidos políticos grandes como a los pequeños o partidos de maletín. La semántica de la frase es simple, es un partido político cuya existencia, estructura y militancia caben completamente en un maletín. En ese importante recipiente están contenidos la escritura de constitución del partido, la libreta de banco y los sellos. La militancia es cero o casi , así que perfectamente encaja dentro también. No tienen una sede , un lugar físico donde validan su existencia, sólo se juntan en el año electoral y hacen la película de su participación. En las elecciones anteriores a las del 2025, participaron 14 partidos políticos, el 98% de la participación se dividió entre 3 instituciones y el restante 2% fue a parar a los 11 partidos restantes. De estos 11 al menos 9 de ellos no consiguieron una votación suficiente ni siquiera para acreditar representación en mesas receptoras, las que andan por el orden de 17000, lo que nos obliga a preguntarnos , quienes estaban representando a estos partidos, ya que pese a “acreditar” representación , ni siquiera sus representantes les favorecieron con el voto. Y de aquí debemos investigar cual es el objetivo de que estos participen.
Los partidos políticos grandes en membresia, hasta hace poco sólo eran 2 y en los últimos 3 procesos electorales ya se contába con 3 , con la estructura en todo el país que los acreditará como contendientes con posibilidades de alzarse con el triunfo, y su beneficio de la existencia de los partidos de maletín estriba en unos pequeños documentos denominados credenciales. Ya dijimos que los partidos políticos en Honduras deben acreditar representación en las mesas receptoras de votos, órgano esté en el que prácticamente transcurre toda la actividad electoral , el día señalado para ejercer el sufragio. Es la Junta receptora quien administra el proceso físico de la elección, recibe al votante, verifica los requisitos de este para ejercer el sufragio y al final del día quienes realizan el conteo de los sufragios. Y a que toda esta historia. Bueno un partido cualquiera recibe del órgano electoral de alzada , el Consejo Nacional Electoral (CNE) , desde hace unos años, tantas hojas de acreditación a juntas receptoras de votos, como mesas receptoras hayan, en el argot popular y político del patio, a este papel le llamamos credenciales. Ya dijimos antes que los partidos de maletín no tienen la membresía suficiente ni siquiera para cubrir los puestos propietarios de representación , alrededor de 17000 personas y menos aún acreditan los representantes suplentes ( la ley determina que debe haber un propietario y un suplente por cada institución política). Y aquí aparece el primer negocio. Los partidos de maletín negocian las credenciales con los partidos grandes , que sí tienen membresía de sobra para acreditar en mesas , lo que genera un balance no equitativo en la correlación de fuerzas en la mesa, para ejemplarizar diremos que en una mesa electoral es posible que un partido tenga 2 o más representantes propietarios con sus respectivos suplentes , aunque legalmente sólo tienen derecho a un propietario y un suplente, y estos estén acreditados como representantes de un partido de maletín. Hay una anécdota en video de un representante acreditado por un partido de estos de maletín, Alianza Patriótica Hondureña , que cuando un reportero le pregunta que a quien representa , dio el nombre de otro partido, obviamente al partido de sus simpatías. Se dice , por que esto no puede ser comprobado que son unos cuantos millones de lempiras los que se mueven detrás del tráfico de credenciales.
Luego está el otro beneficio , no menos jugoso , para los partidos de maletín. La ley electoral en Honduras , según lo dicho en ella misma tiene la obligación de promover la democracia y la participación ciudadana. En este contexto el Estado hondureño presta auxilio económico a los partidos pequeños con el objetivo de que crezcan a través de la promoción de sus actividades, capaciten políticamente a sus membresías y sufraguen los gastos de la campaña , dándoles con esto una posibilidad real de competir frente a los mayoritarios que tienen aportantes económico a muy fuertes. Es así como en el proceso del 2021 cada uno de estos partidillos de maletín se embolsó alrededor de 14 millones de lempiras, a cambio de en algunos casos, 3500 votos en todo el país, cantidad que es insuficiente hasta para ser un regidor corporativo en los municipios más grandes del país. De los millones recibidos , nada que decir, seguramente repartidos entre los 10 o 20 que constituyen la membresia del "partido". Es esta la razón por la que los días previos al año electoral proliferan estos maletines , yendo hacia la capital con el gran propósito de lograr una inscripción del partido , y así convertirse en la gran alternativa para los votantes que no gustan de los partidos mayoritarios, para confiarles el voto. Para el proceso del 2025 por allí de 6 o 7 partidos de maletín quedaron fuera del proceso porque ni siquiera tenían candidatos a alcaldes en la mayoría de los 298 municipios, ni candidatos a diputados en los departamentos. Esto provocó ríos de lágrimas entre los defenestrados que sin asomo de vergüenza gritaban a voz en cuello, que sin su participación , la democracia hondureña sufriría un gran perjuicio y un terrible retroceso.
Habiendo dedicado este tiempo para explicar lo más sucinto posible este asunto, me ocuparé ahora de una nueva figura en el escenario político, “el candidato de maletín”. Visible desde ya al menos 3 procesos electorales este nuevo personaje se identifica con facilidad por que no tiene un partido político, sino que llegado el momento electoral , este tipo de candidatos inician un periplo por los partidos políticos ya de maletín o no , ofreciéndose como el líder que los llevará a las alturas. Es famoso un participante de este proceso 2025 por haber participado con otras formaciones políticas distintas en otros procesos, incluso en dos ocasiones promovió la creación de 2 partidos políticos que luego al sentir que sus opciones no eran satisfactorios emigró hacia otros proyectos políticos, dejando tirada la membresía, poca, pero cuantificable, y convirtiendo a aquellos dos en organizaciones todavía más fantasmales que lo que eran cuando él estuvo por allí. Así las cosas , en el proceso de este año , un partido grande estreno candidato de maletín y dos partidos de maletín , también tuvieron sendos candidatos de igual oficio. Para que se vea que en Honduras todo es posible, y que si para tracalear , algo no existe , nosotros lo inventamos. En mi humilde opinión la folclórica figura del candidato de maletín, complementa a la del partido de maletín y llegó para quedarse.
Y usted qué opina.
MACH
