Gobernados por psicopatas
Definir
al político hondureño es una de las tareas más difíciles que un ser humano haya
decidido emprender. De hecho ignoro si alguna vez algún psicólogo valiente de
los nuestros o de fuera, alguna vez siquiera pensó en lanzarse a semejante
aventura de la ciencia social y del perfilamiento de los sujetos.
Para
el vulgo, las mayorías hondureña no cuesta definir a estos olímpicos sucedáneos
de Dios, que deciden por nosotros, y que nos tienen la vida hecha un yogur de
sufrimientos y desesperanza, merced a
actos “políticos “que rayan con la delincuencia, y que de hecho en mayoría son
hechos criminales en contra de los mas y a favor de los menos.
En
mi articulo Requisitos para cargos de elección
popular , hice
mención de lo que al conocer general, son los atributos de los que candidatos
primero, ungidos después como autoridades, nos gobiernan, deben acreditar
minimamente. Decía en aquel artículo, que la falta de un plan de gobierno, ser
corrupto, ser incapaz y no sentir ningún
respeto por la ley, son los requisitos, que en Honduras garantizan casi, salir
triunfador en cualquier justa electoral. Pareciera que los hondureños aun sin
un análisis científico de respaldo, tuviéramos la tendencia a preferir ser
gobernados por delincuentes.
Esta
vez abordare este mismo tema, desde una nueva óptica, ya no la de la sabiduría
popular sino mas bien desde la perspectiva científica, guardada muy bien en los
textos de los grandes hombres que estudiaron y aun estudian el comportamiento
de los seres humanos y de cómo esto influye en la totalidad del conglomerado
social.
Un
Psicópata, es un ser humano con un trastorno antisocial de la personalidad, o
uno que padece de psicopatía, que es en verdad la enfermedad. El psicópata es un enfermo mental
que sufre de una Psicopatía.
La principal
característica de este tipo de sujetos es la imposibilidad de sentir empatía y
de experimentar remordimientos ante cualquier tipo de situación que normalmente
lo provocaría,
por esto mismo es que interactuarán con el resto de las personas como si fuesen
meros objetos que utilizan únicamente para lograr sus objetivos, generalmente
bastante despreciables los mismos por cierto y en el caso que lo que hagan
resulta ser el beneficio de otro es por egoísmo y para disfrutar en último
término ellos del protagonismo.
Por otra parte, el psicópata tendrá su propio código de comportamiento, por lo tanto, solo sentirán culpa o remordimiento al transgredir el mismo y ninguna en caso de contradecir el del resto de la gente, pero, como en contraposición su comportamiento es sumamente adaptativo pasarán inadvertidos mayormente entre el común de la gente.
Dueños,
además, de necesidades absolutamente atípicas, las cuales por supuesto buscarán
satisfacer y aquí justamente quedarán en evidencia, porque normalmente las
mismas contrarían la costumbre y hábitos del resto.
El
doctor Hervey Cleckley, renombrado
psicoanalista y pionero en la investigación de la psicopatía define entre otras
características clínicas de un psicópata, los siguientes:
v Escasa fiabilidad.
v Falsedad o falta de sinceridad.
v Falta de remordimiento y vergüenza.
v Egocentrismo patológico y carencia de empatía.
Por
otro lado para el doctor Robert Hare, investigador sobre psicología criminal,
algunos criterios que definen a un psicópata son entre otros:
v Tendencia a mentir de forma patológica.
v Comportamiento malicioso y manipulador.
v Carencia de culpa o de cualquier tipo de remordimiento.
v Afectividad frívola, con una respuesta emocional superficial.
v Carencia de empatía. Crueldad e insensibilidad.
Ahora
habiendo leído y pensado en cada uno de estos síntomas, características y o criterios,
es de manera indubitable una aseveración verdadera que, estos, se
encuentran en nuestros políticos hechos gobierno, en la actualidad y los
anteriores.
El
inquilino presidencial, ha sido “cachado” mintiendo públicamente en
innumerables ocasiones, situación que nos hemos dado cuenta, no le ha causado
el menor asomo de vergüenza. Su circulo cercano al igual que el, mienten de
manera patológica, sin mostrar el mínimo de remordimiento cuando son
confrontados con la realidad que ellos niegan. El saqueo del IHSS, SAG, INE,
IMPREMA e INJUPEM, son cosas sin importancia las que tratan de manera
superficial, y encuentro que hasta les divierte el saberse hacedores de este
terrible daño a la hondureñidad y seguir impunes, casi me atrevo a pensar que
les alimenta su personalidad psicópata y egocéntrica.
Una
señora que esta siendo juzgada por haber vendido placebos al gobierno de la
republica, para tratar a personas enfermas que a la postre fallecieron y/o
sufrieron daños irreversibles a su salud, por recibir medicamentos que no
servían para ningún propósito, cuando se presenta públicamente no muestra el
mínimo de empatía, menos aun de remordimiento por las consecuencias que
provocaron sus ambiciones desmedidas. Antes bien esta señora se exhibe cruel,
sonriente, despojada de sensibilidad, y sin remotamente mostrar algún
sentimiento de responsabilidad.
Y
que se puede decir de aquellos que hace unos años nos decían que la reelección
era imposible, y que ni la CSJ, ni el Congreso podían reformar aquello, que hoy
día estos mismos, sin el menor asomo de vergüenza, de dignidad y de decencia,
nos dicen que si se puede. Y los que calificaron en su momento al señor
Hernández como un peligro para nuestro país, y que hoy se han convertido en sus
defensores a ultranza. Cuando nos mintieron, ayer que lo consideraron un
peligro, u hoy que lo consideran un enviado celestial con un cargamento de mana
del cielo que alimentara a este desnutrido y ya sin esperanzas, pueblo
hondureño.
Es
imposible, no ver que si alguien tiene los rasgos psicópatas enunciados por
estas dos personalidades, son nuestros gobernantes, los que se hacen llamar
autoridades, quienes en sus cerebros llevan la carga de pensar, para decidir
cual será nuestro futuro, como país y como personas. Son estos psicópatas que
carecen de empatía y de remordimiento por todo el mal que causan, para obtener
solo su beneficio propio, los que hoy de nuevo, vienen a nosotros a mentirnos
desvergonzadamente, a decirnos que la realidad que vivimos no es cierta, que
estamos mejor que nadie, que no hay pobreza, que no hay miseria, que no hay violencia,
luto y dolor.
Nos
dicen que nuestro sistema educativo ha mejorado, que ya no somos un país
tercermundista, que somos la raza perfecta, el país perfecto, el paraíso
terrenal. Y nosotros seguimos creyendo a estos criminales, y dándoles el poder
de seguir causando daño , ahora mismo , si usted leyó este articulo, ya pudo
darse cuenta , que la sintomatología que muestran estos que nos gobiernan , no
es causa de risa, no debemos hacer befa de la ministra sin cartera, sino mas
bien preocuparnos puesto que a la luz de
la ciencia , estamos siendo gobernados por una raza delincuencial , a quien
nada les importamos , y que son incapaces de sentir nada por el mal que nos aqueja.
Es a nosotros a quienes toca la decisión, o seguir gobernados por psicópatas, o
recluirlos en cárceles o sanatorios mentales, y darnos un gobernante y gobierno,
que clínicamente no tenga rasgos psicópatas.
Feliz
2017, si ya hemos tomado la decisión de hacer algo para cambiar nuestro futuro,
de lo contrario de nada valdrán estos buenos deseos.
MACH
03.01.2017
Por eso los delincuentes encuentran que Honduras es un paraíso. Varios ex jefes de la policia han afirmado que en las alturas están los jefes de las bandas criminales. Muy cierto nos gobiernan puros delincuentes.
ResponderEliminar